martes, enero 29, 2019

Derrota.




Estoy en una esquina lamiendo mis heridas, como si fuera un cachorro malherido. La sensación de haber sido derrotada es densa y se roba mi energía dejándome rota y vacía. En este momento solo una cosa es clara: ya no conectamos.

Ahora nuestras vibras son muy distintas y si vuelven a chocar con la misma intensidad, explotaremos y nos consumiremos hasta que no quede rastro de nosotros.

Seamos realistas, el fuego no juega con fuego y nosotros lo hemos estado haciendo a pesar del peligro inminente. Yo me rindo. Tú ganas. Es hora de llevarme mi alma a otra parte, muy lejos de ti, para que sane y todo lo que hayas arrancada de ella vuelva a florecer.



No hay comentarios.:

Publicar un comentario

¿Qué estás pensando?

Lee "Sunset"